Ver cómo mueren niños en hospitales públicos es algo que genera una herida profunda en el alma, pero saber que es por la desidia de las autoridades de Salud, es de esas que generan cicatrices profundas.
El relato de una de las madres, es escalofriante: Esperaron desde las 8:00 de la mañana un traslado que llegó 14 horas después. Todos los que hemos vivido la enfermedad de nuestros hijos en un recinto de salud conocemos el cansancio, la pena, el miedo y la frustración que se viven en esos difíciles momentos. ¿Podrían las autoridades prevenir esta situación? Claro que sí, era cosa de mirar información pública.
En primer lugar había que observar los datos de esta enfermedad en el hemisferio norte, los números eran claros de la magnitud de la tormenta que se asomaba. La campaña de vacunación no sólo fue tardía (depende de la Subsecretaría de Salud Pública), sino que no cumplió con las metas de años anteriores a iguales semanas de comparación. Los números venían mal, los informes del ISP que deben ser revisados por las autoridades del Minsal daban cuenta que ya, en semana epidemiológica 19 había alertas, en la 21, predomina el virus sincicial y la frecuencia de detección era de un 52,3% siendo el grupo más afectado, el de entre 1 y 4 años de edad. Por eso, unos días atrás hubo saturación y colapso en UCIs Pediátricas sobre todo en Concepción, Temuco, Rancagua, Punta Arenas.
A igual periodo de comparación respecto al virus respiratorio sincicial, pasamos de 2.142 casos a la misma fecha en el 2022 a 4.764 casos el año 2023, más del doble. La autoridad, no vio venir la tormenta, y peor aún, estando en la mitad de ella, no hizo nada para revertirlo, no coordinó la red, no transfirió recursos a tiempo para que los servicios se preparasen, no aumentó camas de manera significativa, no se compraron camas o se coordinó con centros de salud privados, en definitiva no reaccionó, y esa es la cicatriz que queda, la de la desidia por la muerte de esos niños, y esa es la peor de las heridas, las del dolor en el alma.
Jaime González Kazazian, Abogado
Ideas Republicanas